Hábitos saludables para el uso del smartphone
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Categoría: General
Los móviles están demasiados presentes en nuestro día a día y es necesario adoptar una serie de conductas que nos hagan tener unos hábitos menos estresantes para tener un uso saludable del smartphone.
¿Quieres saber cómo?
Evita los problemas de sueño y la fatiga ocular: Lo ideal es que por la mañana no se revisen mails, ni enviar mensajes o revisar las redes sociales, a menos que sea inevitable, para respetar unos horarios básicos. A última hora del día, antes de acostarse, es importante apagar los dispositivos como portátil y Tablet para dejar descansar a los ojos de la luz de la pantalla. Opta por leer un libro, escribir o pasear, ya que son actividades que ayudan a desconectar la mente de las actividades del día y conciliar mejor el sueño. También es recomendable activar modo nocturno o modo avión en el móvil, para evitar recibir notificaciones durante la noche y así relajarse y descansar de forma saludable.
Vida social sin teléfono. No le des a tu teléfono más protagonismo que a tus amigos. Si vas a una cena, dejad los teléfonos a un lado. Es un detalle, que permite concentrar la mente en el momento que se vive y prestar completa atención a los seres queridos, con los que se comparte una conversación o un rato de distensión.
Encuentra una localización fija para el dispositivo. Busca un lugar permanente para el móvil, a tu vista y alcance, que evite que lo lleves siempre encima. Esto reduce enormemente la sensación de dependencia, así como la necesidad de mirarlo constantemente.
Personaliza tus notificaciones. Establecer un sonido diferente para cada tipo de mensaje te permitirá determinar el nivel de urgencia de la llamada o el mensaje. Con esta acción, que busca discernir los temas de trabajo de los personales, o destacar asuntos urgentes, se evita la necesidad de revisar la pantalla cada vez que el móvil suena.
Meditación. Para evitar el estrés, opta por desconectar el teléfono unas horas al día para poder dejar la mente en blanco. Relájate, respira, escucha música tranquila… y tratar de conectar cuerpo y mente, es una práctica saludable que nos ayuda a centrarnos en el momento y lugar que vivimos. Además, establecer ese momento como rutina, te permite liberar la tensión contenida durante el día.
