Consejos de seguridad para usar el horno
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Categoría: Electrodomésticos
El horno es cada vez más protagonista de nuestras recetas. Gracias a su variedad de funciones, la posibilidad de cocinar con vapor, y sus resultados sanos y sabrosos, es un electrodoméstico muy usado en la cocina, pero que al ser una fuente de calor intenso, debe ser tratado con precaución.
Aquí te damos una serie de recomendaciones:
- Después de cocinar, deja que el horno se enfríe, pues queda un calor residual tanto en su interior como en las bandejas y accesorios que haya.
- Utiliza siempre manoplas o guantes aislantes para proteger tus manos de las altas temperaturas que hayan adquirido los recipientes tras el proceso de cocción.
- Abre la puerta con precaución. Una vez hayas acabado de cocinar con vapor y antes de iniciar un nuevo proceso de cocción, elimina cualquier resto del agua del interior.
- Después de haber cocinado algo en el horno, te aconsejamos que dejes enfriar el interior del horno, y tras ello, limpies tanto el interior, como la resistencia y los accesorios. De lo contrario, los restos de comida, grasa y jugo de asado se quedarán impregnados pudiendo estropear tanto la cavidad como los accesorios.
- Cuando uses papel de hornear en alguna receta, recuerda adaptarlo bien a la superficie de la bandeja. Lo más recomendable es colocar sobre él una vajilla o molde que lo sujete bien. ¿Por qué? Para evitar que el papel sobrante entre en contacto con las zonas emisoras de calor del interior del horno.
- Para los asados, seguramente utilices algún alcohol que aporte sabor y aroma. En esos casos, no introduzcas el alcohol o cualquier otra sustancia en el interior del depósito de vapor, ya que este y los conductos podrían verse dañados. En el depósito de vapor solo se puede introducir agua fría o templada, incluso agua aromática sin ningún resto sólido.